viernes, 18 de febrero de 2011

Todo en la misma bolsa

Sí, volví. Sé que a nadie le importa, pero en fin.
No estoy de acuerdo con esto de meter todo en la misma bolsa, pero creo, porque es así, que hay muchas cosas a las que se les puede atribuir generalidad. Decir “las mujeres son emocionalmente inestables” o “los que escuchan Cumbia son unos ignorantes” no es en absoluto incorrecto. Hay excepciones, pero la generalización es totalmente permisible.
Desarrollo este ejemplo: la imagen que damos los argentinos en el exterior. Nos consideran rápidos, pícaros, desinhibidos, caraduras y un poco garcas. Yo pertenezco al grupo (de los argentinos) pero no al subgrupo (de todo el resto de cosas), pero no por eso voy a saltar como leche hervida con esa boludez de “eh, pará que no todos somos así”. Obviamente, voy a aclarar que hay personas y personas, pero si damos cierta impresión en otros lugares, por algo será… y tenemos que hacernos cargo. No digo aceptar que somos una basura, no. Eso es absurdo. Lo que sí, reconocer que tienen un concepto de nosotros, y que eso tiene sus causas, por más que no haya sido uno mismo el que dejó marcado su sello en quienes opinan.
La imagen no es nada, la sed es todo… Bue, chau salamines.