domingo, 31 de enero de 2010

Me derrito, me congelo

Es la maldición de maldiciones veraniegas, miedo de chicos, enfermedad de grandes. Problema de todos. Señoras y señores, con ustedes........ ¡el salto térmico! (Aplausos). Bueno, basta de payasadas.
El caso más común que se me ocurre es el del supermercado. Afuera hace un calor agobiante y adentro un fresquete innecesario. El abrupto cambio de temperatura (calor-frío al entrar y frío-calor al salir) puede generar perjuicios a la salud, dando por hecho la falta de confort, mejor cambio la palabra, bienestar de las personas. La cuestión es que los borregos estos están gastando más energía de la necesaria con los aires acondicionados, y generando tosecillas y estornuditos a los borregos que entran a comprar.
En fín, por razones vacacionales, nos estaremos viendo, o leyendo más bien, en unos diez días. Hasta entonces.
¡Cof, cof. Achís!

5 comentarios:

Hermana de SDU-7 dijo...

A mí me resfría salir al sol. Por eso no salgo de día, jojoj
sflnajdsgfhs

El Informante zombie dijo...

Por eso estoy feliz de estar muerto.
(???)

El Informante zombie dijo...

Por eso estoy feliz de estar muerto.
(???)

Dr. dijo...

Yo doy vueltas en los supermercados y no compro nada cuando tengo calor y estoy aburrido.. todo porque esta fresquito...

Flavio dijo...

Ah, pero creí que al volver iban a haber como 50 comentarios!
No, no es cierto.